viernes, 23 de noviembre de 2012



  INTRODUCCIÓN

El alcoholismo ocupa actualmente un lugar importante entre las enfermedades psico sociales que interesan a la Salud Pública, tanto por su magnitud como por su trascendencia la historia natural del alcoholismo mediante el estudio de 2.000 casos. Aquí demuestra irrefutablemente que el alcoholismo es una enfermedad.

Estudios clínicos realizados en base a sus ideas comprobaron que la dependencia  psicológica y especialmente la dependencia  física hacia  el   alcohol   es irreversible. "De esto se desprende que la meta-del tratamiento del alcoholismo es la abstinencia definitiva de bebidas alcohólicas".

Esta concepción nos permitirá intentar explicaciones que se ajusten a la realidad de nuestros pueblos.Muchos son los estudios realizados en que se demuestra el grave daño que ocasiona  el alcoholismo, tanto en forma  individual   como  social. Con  datos precisos se ha comprobado en algunos países que el alcoholismo ocasiona grandes pérdidas, algunas de ellas irreparables. Diariamente reportan los informativos nacionales, de hondureños muertos por intoxicación alcohólica, por accidentes automovilísticos, homicidios, etc. en la que la ingestión inmoderada de bebidas alcohólicas está presente. 



  EL ALCOHOLISMO MINA LENTAMENTE A LA SOCIEDAD HONDUREÑA

A pesar de que el alto consumo de alcohol es uno de sus principales problemas sociales, en Honduras no se conocen ni se estiman las pérdidas económicas que le representa al Estado esta actividad y que mina lentamente los cimientos de su sociedad.

Estudios del Instituto Hondureño contra la Drogadicción y la Fármaco dependencia (IHADFA) revelan que los altos consumos de alcohol contrastan, para el caso, con la producción y consumo de leche pasteurizada.

En el 2001, según sus estadísticas, en Honduras se consumieron 386 millones de botellas de cervezas, 93 millones de botellas de 1/8 de aguardiente y 37 millones de botellas de licor compuesto (whisky, ron, vinos). En el mismo período se consumieron 81 millones de leche pasteurizada. La diferencia es significativa.

Las ciudades de mayor concentración poblacional son por igual las zonas donde más ventas y consumo de alcohol y drogas se registran, no obstante, que los consumos de alcohol en el área rural son por igual muy elevados.

El consumo de alcohol se da por igual entre ricos y pobres, profesionales y analfabetos, y en la sociedad de hoy resalta el hecho de que las mujeres están consumiendo más alcohol, en comparación con el reciente pasado que hacia creer que éstas eran conductas exclusivas de los hombres.

Los jóvenes comienzan a muy temprana edad a consumir alcohol y drogas, y la marihuana, las pastillas de diazepán, el tabaco, el resistol y la cocaína son las drogas más usadas en esta empobrecida nación.

La televisión es el medio que mas influye, que más induce a los jóvenes al uso de alcohol y drogas. Cada 4 minutos las televisoras transmiten un anunció de bebidas alcohólicas o telenovelas o películas en las que se induce de manera muy sutil a su consumo. La televisión es promotora de patrones culturales foráneos que fácilmente son copiados por los jóvenes hondureños.

Un estudio en institutos de educación media realizado entre 1989 y 1996 en 19 institutos de educación media revela que un 50.5 por ciento de los encuestados -1,264 jóvenes de entre 10 y 40 años de edad-, habían ingerido bebidas alcohólicas al menos una vez en su vida.

Lo más relevante de la investigación fue que el 71.1 por ciento lo habían hecho por primera vez entre los 10 y 14 años de edad, aduciendo diferentes causas, resaltando entre éstas la de la curiosidad.

La incidencia de uso de alcohol en institutos privados es igual a la de los públicos.




CONSECUENCIAS


 Los problemas relacionados con el consumo de alcohol en la sociedad son graves, sin embargo, el impacto de los mismos no se ha medido ni social ni económicamente. Se conoce que este es uno de los principales factores de desintegración familiar, de violencia doméstica, de accidentes de tránsito, de ausentismo laboral, generador de procesos de corrupción y de daños a la propiedad pública y privada, de educación, sin embargo, son impactos no medibles de manera cuantitativa.

El alcoholismo es generador también del abandono escolar a temprana edad, mal uso del tiempo de los niños y adolescentes y de la vagancia juvenil, debido al descuido de que son objeto por parte de sus padres alcohólicos.


Un estudio epidemiológico realizado entre niños y jóvenes de y en la calle entre 8 y 18 años muestra que la mayoría de ellos son hijos de padres alcohólicos, con hogares desintegrados.


El alcohol es, además, el responsable de seis  de cada ocho  muertes violentas que se reportan en el país. En el área rural, según los estudios, es mayor la incidencia de muertes relacionadas con esta causa.


El alcohol es también la segunda y/o tercera causa de accidentes de tránsito en las ciudades más importantes del país (Tegucigalpa y San Pedro Sula) y en el principal corredor terrestre del país: la carretera del norte, donde se promedia un accidente por día. Es la quinta causa de accidentes de tránsito a nivel nacional.

Esta es también la droga más fácil de obtener, en navidad y el período de Semana Santa es cuando más se consumen bebidas alcohólicas.

Técnicos del IHADFA expusieron además que el frecuente uso de alcohol entre la población hondureña es un problema efecto / causa de otras situaciones problemáticas de la sociedad.

En lo económico constituye un serio obstáculo para el mejoramiento de la producción y la productividad nacional, señalaron.

En el campo de la salud es fuente generadora de diversas alteraciones físicas y mentales que repercuten en forma negativa para alcanzar mejores estadios en la calidad de vida.

En lo social, obstaculiza los procesos formativos de la población, principalmente de los niños y jóvenes, y es una de las principales causas de los procesos tan comunes hoy de desintegración familiar o debilitamiento de la responsabilidad de las personas frente a su vida familiar, comunal y social.

El alcoholismo constituye un factor negativo para que la niñez y juventud tengan la seguridad y oportunidades de desarrollo humano que necesitan.

Los graves daños a la economía, la familia y la sociedad no logran ser todavía cuantificados en esta nación centroamericana en la que los altos índices de pobreza, los bajos salarios, no desfavorecen los altos consumos de alcohol y drogas entre su población joven y adulta.


PRODUCCION INDUSTRIAL SELECCIONADA 

(MILES DE UNIDADES)
1995
2000
CIGARILLOS (20 UNIDADES)
119,425
282,771
CERVEZAS (12 0NZ)
236,252
255,804
AGUARDIENTE (LITRO)
2,376
1,694
Licor compuesto (litro)
5,130
7,166

Relación expendios - Centros educativos en Tegucigalpa
No. De expendios de aguardiente en Tegucigalpa
10,736
No. Centro Educativos en Tegucigalpa
497
Fuente: IHADFA


 Unos 174,000 alumnos consumen alcohol en Honduras


El año pasado, la Policía capturó a decenas de estudiantes, sobre todo de centros públicos, por la ingesta de alcohol.
Consumo de drogas
Tegucigalpa, Honduras

Casi uno de cada tres estudiantes hondureños de educación media consume alcohol u otra droga.Eso es lo que revela el informe del Instituto Hondureño para la Prevención del Alcoholismo, Drogadicción y Farmacodependencia, Ihadfa, en el que se afirma que el 29% de los estudiantes de secundaria consumen drogas y bebidas alcohólicas.El documento corresponde a estudios realizados durante el periodo académico del año 2011. Conforme a las estimaciones proporcionadas por el ministro de la Secretaría de Educación, Alejandro Ventura, en 2011 se matricularon 2,189,000 estudiantes en los tres niveles lectivos. 

De esos, unos 190,000 cursaron el nivel preescolar, 1,400,000 en básica y cerca de 600,000 estudiaron en el nivel medio.
Entonces, al aplicar la estimación del Ihadfa a la cantidad de estudiantes de media de 2011 se obtiene la nada agradable cifra de 174,000 alumnos que consumieron alcohol u otra droga durante ese año.


Hábitos de consumo


Pero todo parece apuntar a que durante el último año la situación se agravó aún más, comparada con otros años.Según lo que sostiene el director del Ihadfa, Rony Portillo, “entre las drogas que se ingieren están la cocaína, crack y la marihuana, aparte del alcohol”.Al parecer la cocaína y el crack están ganando más terreno.El documento del Ihadfa detalla que entre el 14 y 17% de los estudiantes de educación secundaria, es decir, entre 84,000 y 102,000 jóvenes estarían consumiendo marihuana.Mientras que un 7%, cerca de 42,000 (sobre la base de 600,000 estudiantes de acuerdo con los registros de la Secretaría de Educación) estaría inhalando cocaína y un 4%, unos 24,000, consumiendo crack, reveló el funcionario.


Privados y públicos


El informe incluyó datos tanto de centros de educación privada como de públicos. También identificó que una mayor capacidad de ingresos económicos de sus padres expone o facilita aun más el acceso a las drogas y al alcohol. Portillo reveló que durante la investigación se constató que el consumo de droga se ve con mayor incidencia en los estudiantes de los colegios privados debido a que tienen mayor acceso al dinero.

El estudio también revela que en las ciudades con mayor población y más industrializadas es donde se produce el mayor consumo de drogas.Del 29% de los estudiantes que ingieren alcohol, el 5% son mujeres, según el Ihadfa, lo que evidencia que el fenómeno tampoco hace distinción de género.Tegucigalpa, San Pedro Sula, Chamelecón, Puerto Cortés, Choluteca, Tela, La Ceiba, Comayagua, Juticalpa y Catacamas tienen la mayor incidencia.





                                                             SITUACIÓN ACTUAL

Son pocos los estudios realizados en el país que nos puedan brindar un
conocimiento amplio del problema que suponemos como muy grave. La mayoría
de ellos han sido realizados en Tegucigalpa, capital de la República, y especialmente
en el Hospital Psiquiátrico "Dr. Mario Mendoza" única institución estatal
que por muchos años han brindado atención directa al enfermo alcohólico. Los
demás hospitales del Estado se han limitado a dar atención a los que adolecen
de tratarnos físicos secundarios al alcoholismo.
Son múltiples las formas en que se reciben mensajes que invitan a la ingéstión
de bebidas alcohólicas pero muy pocos los que previenen al pueblo sobre
la enfermedad del alcoholismo. No existe en el país ninguna Ley que controle "
la propaganda de las bebidas alcohólicas.
Aun cuando se sabe que la educación a todos los niveles y dirigida a modificar
la intemperancia es importante en el enfoque del Alcoholismo, ésta no se
realiza.
Las Instituciones Educativas del país poco o nada hacen para solucionar
el problema. No existe en Honduras un proceso educativo1 formal que prevenga
a los estudiantes sobre la enfermedad del Alcoholismo. Fuera de algunos Foros
y Seminarios que se realizan ocasionalmente en la Universidad, ésta no ha mostrado
hasta ahora mayor preocupación por el Alcoholismo en Honduras.
La Legislación hondureña en lo que se relaciona con el Alcoholismo resultaobsoleta
y al enfermo alcohólico que deambula por las calles se le encarcela
y se le castiga por las autoridades que tienen poco o ningún conocimiento del
problema.
Los establecimientos de venta de bebidas alcohólicas se ubican sin ningún
control y en un estudio de la T. S. Amanda Von Eicken  se menciona que,
en la capital existen 58 expendios cerca de alguna escuela y 39 cerca de alguna
iglesia.
"Existen en Tegucigalpa, 2.000 establecimientos de expendios de bebidas
alcohólicas, lo que correspondería a un local por cada 75 personas mayores
de 15 años.
En su mismo estudio Von Eicken menciona que en 1974 hubo un ingreso'
al fisco de L. 25,879.025.10 solo de impuesto a bebidas de producción nacional
controlada, y de L. 856.852.00 como producto de impuestos a la importación
de bebidas extranjeras durante los 6 primeros meses del año. A pesar de estos
generosos ingresos, el Estado no dedica ningún presupuesto especial para combatir el alcoholismo.


DAÑOS A LA SALUD


File:Possible long-term effects of ethanol-spanish.png

 

El alcoholismo es una enfermedad que ha ocupado los primeros lugares
entre los trastornos que requieren atención psiquiátrica en el país. En un estudio
realizado en el Hospital Psiquiátrico de Honduras en 1967 el Dr. Richard W.
Hudgens  encontró que el alcoholismo y las esquizofrenias eran los desórdenes
predominantes entre los pacientes hospitalizados y que sin considerar el diagnóstico, el 72% de los hombres y el 8% de las mujeres hospitalizadas tenían una historia presente o pasada de ingestión excesiva. "Esta prominencia de excesos alcohólicos existía también entre los familiares de. los pacientes hospitalizados; 
65% de todos los pacientes y 84% de los alcohólicos tenían historia familiar de alcoholismo.
En ese mismo estudio el Dr. Hudgens afirma que "El alcohol también
jugó un papel de importancia en homicidios y suicidios entre los familiares de
los pacientes hospitalizados en Honduras. "Los 71 pacientes que dieron una
historia familiar aceptable nombraron 18 familias que habían cometido homicidios
y 8 se habían suicidado. Todos los 18 que habían matado a otra persona eran
hombres y 7 eran probablemente alcohólicos."
De acuerdo a estadísticas hospitalarias en 1974, 1.000 personas necesitaron
atención especializada para tratamiento de su alcoholismo. El 60% de varones que ingresaron al Hospital Psiquiátrico "Dr. Mario Mendoza", fueron clasificados
como alcohólicos. 

Resulta interesante además que en un estudio previo se notó
que "los alcohólicos hospitalizados pertenecían a una clase social significativamente
más alta que los pacientes con otros desórdenes. Parece que los alcohólicos de clases más bajas rara vez reciben tratamiento psiquiátrico formal en
Honduras, a pesar de ser numerosos." En 1972, noventa personas (60 hombres y 30 mujeres) murieron en el país por cirrosis hepática, que es una enfermedad íntimamente relacionada con el alcoholismo.




En el mismo año 1972, el 46% de las defunciones registradas en el país
para enfermedades mentales (incluyendo las epilepsias), fueron de enfermos
alcohólicos. Para 1973, fueron reportados por los hospitales estatales 86 casos de 
psicosis alcohólicas que necesitaron hospitalización produciendo 500 días de estancia.

Fueron hospitalizados produciendo 6.935 días de estancia, 1610 alcohólicos.
Según la misma fuente, en 1973 se reportaron 229 casos de cirrosis hepática
que produjeron 3,870 días de estancia. De los 229 casos fallecieron 47.
En un estudio realizado por nosotros:  "La Atención Psiquiátrica en el
Hospital "Dr. Mario Mendoza", durante los años 1970, 1972 y 1974" en el que
se tomaron en cuenta solamente los pacientes que necesitaban atención por primera vez, encontramos que durante esos años el alcoholismo absorbió el 13.8%; 8.8% y 9.4% respectivamente de las atenciones hospitalarias. En ese mismo estudio se demostró que el promedio de días de hospitalización (1970 - 5.7 días,. 1972 - 4.2 días y 1974 - 2.8 días) se hace cada vez menor debido1 probablemente a la necesidad de dar atención a otros pacientes demandantes.
Resulta interesante además en ese mismo estudio ver como el alcoholismo


que no aparece en el sexo femenino durante los años de 1970 y 1972, para 1974
ya produce un 7.9% del total de alcohólicos atendidos en ese hospital. En 1970
no aparecen alcohólicos en menores de 21 años, pero en 1972 y 1974 ya se
reportan casos, lo que está de acuerdo con estudios realizados en Costa Rica
que muestran que la mayoría de los alcohólicos "Iniciaron su primera ingestión
entre los 15 y 19 años" . Durante los 3 años en estudio el alcoholismo se  presentó con mayor frecuencia entre el grupo etario comprendido entre los 31 y
60 años, que es en nuestro país el período de mayor productividad. También es
concluyente nuestro estudio en que el grupo que se dedica a oficios manuales
(obrero, campesino, vendedor de lotería y del mercado, artesanos) es con mucho, el más afectado.
Es alarmante saber que entre las diez principales causas de defunciones,
el rubro de los "Accidentes, envenenamientos y homicidios" ocupa el 2° lugar.
La estrecha relación que en Honduras existe entre este rubro y la ingestión
inmoderada de alcohol no puede pasar desapercibida.




RECURSOS

Los recursos de que se dispone en Honduras para la atención del Alcoholismo
son insuficientes, de regular calidad y mal utilizados.


RECURSOS MATERIALES

Actualmente se cuenta con seis servicios de desintoxicación, funcionando el
principal en el Hospital Psiquiátrico "Dr. Mario Mendoza" y cinco más en los
hospitales generales de Choluteca, La Ceiba, Tela, Santa Bárbara y Comayagua.
Cada uno de estos servicios cuenta con un promedio de 5 camas; lo que significa
que para la desintoxicación alcohólica en el país se dispone de 1 cama por cada
95,977 habitantes aproximadamente.
Algunas Clínicas privadas prestan el Servicio de Desintoxicación Alcohólica
siempre y cuando el paciente no adolezca de algún síndrome cerebral orgánico
psicótico en cuyo caso es rechazado y remitido al Hospital Psiquiátrico "Dr.
Mario Mendoza", o a Clínicas Psiquiátricas extranjeras. Tenemos conocimiento
que solamente la Clínica El Carmen (privada) dispone de 3 camas exclusivamente
para la atención de enfermos alcohólicos.
No existe en el país "hogares temporales" y ningún otro tipo de servicio
de rehabilitación para alcohólicos en los que la terapia ocupacional y. recreativa
se utilice.

RECURSOS ECONÓMICOS

Se desconoce el financiamiento que las clínicas privadas dedican para sus
servicios de desintoxicación alcohólica.
La Fundación Hondureña Sobre Alcoholismo funciona en base a las cuotas
voluntarias que pagan sus miembros y a las donaciones que ocasionalmente
reciben de algunas empresas nacionales y personas colaboradores. No reciben ayuda gubernamental.

Los grupos de A.A. funcionan en base a las contribuciones voluntarias de sus propios miembros. No reciben ningún otro tipo de ayuda económica ni material.

El Estado, fuera del costo de los- Servicios de Desintoxicación Alcohólica establecidos en sus hospitales, no destina ninguna partida presupuestal especial para combatir el alcoholismo.

RECURSOS HUMANOS

No hay en el país profesionales que se dediquen exclusivamente a la atención
del enfermo alcohólico. Algunos Psiquiatras del Hospital Psiquiátrico "Dr. Mario
Mendoza" y los Médicos, Enfermeras y Trabajadoras Sociales que laboran en los
Servicios de Desintoxicación Alcohólica en los hospitales generales han recibido
algún entrenamiento en el manejo del enfermo alcohólico.
Desde 1975 el personal profesional de los Dispensarios de Salud Mental
adscritos a los Centros de Salud, realizan actividades educativas contra el alcoholismo
entre la población joven preferencialmente. Brindan atención psicológica
al enfermo alcohólico que asiste a consulta en demanda de ayuda. Realizan
Seminarios y Foros Públicos tendientes a concientizar a la población sobre la
gravedad del problema y la necesidad de establecer una lucha unida, continua
y efectiva contra la enfermedad.
Entidades religiosas delegan en algunos de sus miembros las actividades
que en forma de charlas contra el alcoholismo, la drogadicción y el tabaquismo
dan a los miembros de su agrupación en forma ocasional como parte de sus
Programas de Temperancia.
Desde hace 3 años funciona en el país la Fundación Hondureña Sobre
Alcoholismo con personería jurídica, y compuesta por profesionales conscientes
en la gravedad del problema. Desafortunadamente la ayuda gubernamental que
reciben es nula y sus logros han sido escasos.
Existe en el país grupos de a.C. que localizados en casi toda la extensión
territorial dan la ayuda necesaria a todas aquellas personas que reconocen ser
alcohólicos y buscan solución a su enfermedad. Su labor es grandiosa.



PERSPECTIVAS DE SOLUCIÓN

La aceptación a nivel de nuestras autoridades ministeriales de que el
alcoholismo es una enfermedad, abre perspectivas halagadoras en la necesaria
lucha que nuestro país debe mantener contra esta enfermedad.
La creación de la División de Salud Mental en el Ministerio de Salud Pública
y Asistencia Social, como oficina coordinadora y normativa de las actividades
que se realicen en el país tendientes a buscarle solución al problema,
dan mayores perspectivas.
Estamos de acuerdo con el Dr. Luís Weinstein cuando dice que "seria utópico
creer que un programa a nivel nacional sobre la prevención, tratamiento
y erradicación del alcoholismo haría desaparecer dicho problema." pero
vemos en la elaboración de un "Sub-Programa Nacional Contra el Alcoholismo"
 un gran paso de parte de las autoridades ministeriales, tendientes a iniciar
una lucha abierta, y tenaz contra el flagelo que es el Alcoholismo en Honduras.